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Check Point hace de la “confianza cero” un pilar de apalancamiento para crecimiento de la empresa y sus canales

En entrevista exclusiva con Miguel Hernandez y López, Jefe de Ingeniería de Check Point, comentó que la marca pudo experimentar durante la pandemia, buenas oportunidades de negocio debido al impulso en transformación digital que sufrieron la gran mayoría de las empresas.

En la parte de innovación, a nivel de centro de datos, la empresa centró su estrategia ofreciendo su arquitectura Check Point Infinity basada en Zero Trust, que permite a los clientes asegurarse de quiénes son los usuarios, desde dónde acceden y verificar si cuentan con los permisos para las acceder a las diferentes áreas.

Check Point hace de la “confianza cero” un pilar de apalancamiento para crecimiento de la empresa y sus canales

Hernández destacó que la demanda de soluciones de ciberseguridad flexibles y escalables permitió un repunte en la comercialización de Check Point Maestro, ya que las empresas podían solicitar una solución on-premise con ciertos niveles de throughput y performance bajo demanda y posteriormente incrementarlos de acuerdo con sus necesidades de crecimiento. Esto significó un gran alivio respecto a la inversión económica que las organizaciones tuvieron que hacer, en tiempos donde la premisa era cuidar los recursos para no poner en riesgo la estabilidad del negocio.

“Es importante destacar que incrementar el performance de la infraestructura con Check Point Maestro prácticamente se podía hacer en minutos, lo que cautivó a los clientes porque no vieron afectada su operación”, señaló el Jefe de Ingeniería.

Para las oficinas ubicadas en localidades diferentes al corporativo, se entregaron soluciones con tecnología SD-WAN que permitía a los usuarios además de seguridad, utilizar sus enlaces residenciales priorizando el tráfico hacia la oficina principal.

En cuanto a servicios cloud, el fabricante cuenta con una solución para proteger el desarrollo de aplicaciones nativas de la nube, se trata de Check Point AppSec, que automatiza la detección de amenazas sin la necesidad de recurrir a firmas pues está basado en análisis de comportamiento.

“Tenemos protección a nivel de dockers y kubernetes, para los usuarios que están trabajando desarrollos en contenedores. Cubriendo una parte importante vital de ciberseguridad, ya que los contratos de servicios en la nube señalan que la seguridad es un tema compartido entre el cliente y el proveedor de servicios”, comentó Hernández.

Crecimiento con canales

En el parte de socios de negocio, Miguel Hernandez compartió que el confinamiento no fue impedimento para el crecimiento de los canales, ya que los proyectos fueron progresando gracias a las necesidades que detonó la pandemia. “En este periodo de casi dos años, la empresa hizo grandes esfuerzos para mantener al día a los partners en cuanto a las nuevas tecnologías, incluso el acercamiento se mantuvo con eventos virtuales incluyendo uno de los eventos más importantes como el CPX”, mencionó.

“El panorama de crecimiento con los clientes de América Latina, no fue diferente a otras partes del mundo, es decir, los proyectos antes de la pandemia por lo regular se llevaban a cabo porque las empresas habían tenido problemas de ciberseguridad y en consecuencia trataban de protegerse pero limitaban el alcance del proyecto solo al interior de sus instalaciones. En cuanto detonó el confinamiento se tuvo la necesidad imperante de incrementar la seguridad, por ejemplo, a los usuarios remotos que usaban sus dispositivos móviles para realizar su trabajo; en ese momento apoyamos a muchos clientes con licenciamiento de evaluación y se lograron cerrar muchos proyectos brindando la confianza a los usuarios de que sus colaboradores podían trabajar desde cualquier locación con las mismas políticas de ciberseguridad como si estuvieran en la oficina corporativa”, explicó el ejecutivo.

Por último, Hernández comentó que las amenazas en ciberseguridad no son exclusivas de las grandes empresas, ya que organizaciones de todos tamaños puede llegar a sufrir un ataque y ver su patrimonio en riesgo, precisamente por el impacto que pudiera llegar a tener, no solo económico sino de reputación o de cumplimiento.

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